Además, nos sumergimos en el arte digital con Tux Paint, donde pude plasmar mi creatividad al dibujar un personaje icónico como Spike de Brawl Stars. Mientras tanto, otro grupo se aventuraba en el desmontaje de un ordenador, explorando sus entrañas y descubriendo cómo funciona cada componente.
Por si fuera poco, también nos embarcamos en el emocionante proyecto de armar un robot de pintura, combinando habilidades técnicas y creativas para dar vida a esta innovadora creación. Fue un día enriquecedor en el que cada uno de nosotros pudo explorar y desarrollar nuestras habilidades en diferentes áreas, creando un ambiente de colaboración y aprendizaje mutuo. ¡Sin duda, una jornada memorable llena de descubrimientos y nuevas experiencias!